“Hay señales de que el gobierno municipal vuelve a la carga y probablemente va a avanzar con el proyecto "Landfarming Escobar" en el basural de Amancay”, alertan desde SOS Humedales. Y efectivamente, el jueves 5 de mayo a las 11 el municipio de Escobar preparó una visita al predio en el polo ambiental ubicado en Maquinista Savio, donde la empresa Landfarming Escobar, de los empresarios Héctor A. Chechic, Jorge E. Cociancich y Francisco J. Rey pretende establecer la planta en el Barrio Amancay.

“Vamos a recibir toda la basura del distrito y más quizás. En diciembre último movilizamos contra este emprendimiento y a pesar de ello día a día siguen llegando camiones llenos de basura”, expresaron vecinas y vecinos del barrio que participan en el FOL, por lo que tomaron la decisión en asamblea de participar de esa visita que propone el municipio para cuestionar la instalación de una planta de tratamiento de efluentes líquidos y residuos sólidos.

De concretarse este proyecto implica que el tránsito cotidiano de cientos de camiones diarios aumentará, algunos atmosféricos trayendo los barros de la mierda de otros barrios, y otros cargados con cosas tales como guano de granjas, residuos de frigoríficos, entre otras. Cualquiera que ha visto a los camiones que hacen este tipo de transporte sabe que vienen cargados de ratas, moscas y un montón de acompañantes invisibles. Hablamos de 500 a 700 camiones diarios.

“Ya se dijo en la audiencia pública en diciembre de 2021 y en la documentación presentada que este tipo de empresas sólo puede radicarse en un parque industrial, todos sabemos que la clasificación de categoría 2 para este emprendimiento es mentirosa y se hizo a propósito para poder ponerla ahí porque es el negocio que ya tienen montado y acordado a espaldas de la comunidad – sostienen desde SOS Humedales y continúan-  En todos lados donde se radican estas empresas (por ejemplo caso LandNort en Campana) dejan un desastre total. Landfarming tiene que ir a un Parque Industrial, pagar su lote y hacer su planta donde corresponde y adecuándose no solo a las normativas sino también a su responsabilidad de cuidar la salud pública y ambiental, no en medio de un barrio que encima ya sufre todas las agresiones imaginables.”

La audiencia pública se realizó el 30 de diciembre en el Teatro Seminari, prácticamente sin previo aviso y entre las fiestas. La comunidad de Barrio Amancay y de otros barrios de Escobar se acercaron a la audiencia pero no fueron escuchadas. Todo fue un circo: los funcionarios, ingenieros y técnicos, tomaron nota de las objeciones al proyecto, pero la decisión política pasa por otro lado.

Mientras tanto, Amancay es un barrio popular que ya está severamente castigado por otros graves problemas ambientales: dos grandes basurales a cielo abierto, una planta depuradora cloacal que recibe unos 100 camiones atmosféricos diarios, un arroyo altamente contaminado, y agua de las napas tan contaminadas que producen hasta afecciones en la piel por contacto. A esto se agregarían los olores, el polvo, el potencial infeccioso, roedores, y el intenso tránsito de unos 500 camiones diarios cargados con estos residuos por las calles de este barrio.

“Además el gobierno municipal no tiene ninguna capacidad para garantizar el control de la operación de ese predio, como queda totalmente de manifiesto en el basural de Manny, en Escobar, denunciado decenas de veces, y totalmente ilegal tal como ha informado el Ministerio de Ambiente de la Provincia”, concluyen desde SOS Humedales.

Por su parte, vecines del FOL reafirman la convicción de manifestarse, “si no salimos a la calle, al basural lo van a poner ahí, y va a ser un desastre para la vida cotidiana.” Por lo que invitan a la comunidad entera a asistir mañana al predio de la calle Picaflor al 3500 y expresar el no a la instalación del basural, por el futuro de sus hijes y por una vida digna y plena en salud.