lucha por salario digno
Huelga histórica de aceiteros
Desde el 9 de diciembre, trabajadores de la industria aceitera y de exportación de granos llevan a cabo una gran huelga, no solo por la cantidad de días, sino por el marco de unidad de los gremios, el apoyo de otros sectores y el crecimiento en conciencia de la lucha. Esta mañana a las 11 en el Ministerio de Trabajo de la Nación empezó la audiencia para que se alcance un acuerdo, luego de 21 días.
Reseña de una lucha
Trabajadores de tres gremios, a saber la Unión Recibidores de Granos (URGARA), el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros de San Lorenzo y la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines (FTCIODyARA) sostienen 21 días de huelga en reclamo de recomposición salarial negada por la patronal, las empresas agroexportadoras.
La lucha que vienen llevando los trabajadores tiene hoy otro capítulo, al asistir a una audiencia en Ministerio de Trabajo de la Nación, con la expectativa de que se llegue a un acuerdo. Desde hace años que los trabajadores de este sector vienen marcando un rumbo en la lucha por el salario digno, que todos los demás trabajadores de otras ramas venimos siguiendo atentamente, ya que su fuerza apuntalada reside en la unidad.
Los inicios del conflicto actual apuntan al incumplimiento de acuerdos salariales firmados previamente a la pandemia, que se fueron postergando durante meses, y eso implicaba que la revisión pautada para agosto a los empresarios no les importaba y su interés solo se centró en seguir teniendo ganancias millonarias en este duro contexto.
Al pedido de un salario digno, aumento del Salario Mínimo Vital y Móvil, se sumó también las mejoras en las condiciones laborales y en higiene y seguridad. Las empresas, nucleadas en Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) no solo hicieron caso omiso de estos reclamos, sino que salieron beneficiadas por el poder Ejecutivo que les otorgó concesiones en torno a rebajas de retenciones. Por un lado, una generalizada y temporal para las exportaciones de soja, y por otro, una adicional, persistente en el tiempo, que reinstauró el diferencial para el valor agregado de aceites, harinas y subproductos.
Ante esa provocación a la clase trabajadora, las asambleas derivaron en la herramienta de lucha de la huelga.
En el testimonio de Cristian Montaño, trabajador de Oleaginosa Moreno Puerto Galván (Bahía Blanca, Buenos Aires) y Secretario de Prensa y Formación de la Federación, se amplía esta idea, “es una unidad en la lucha en la cual los tres gremios aportan muchísimo porque se está parando desde la comercialización de granos, la industrialización, el valor agregado a la materia prima, y la exportación con veintidós, veintitrés puertos paralizados en todo el país. La unión de los tres gremios nos hizo mucho más fuertes.
Me parece que es un problema más político, de presiones de estas grandes agroindustrias hacia el gobierno. No les alcanzó con que el Presidente Alberto Fernández bajará las retenciones gradualmente sino que van por más. En un momento, los gobiernos se sentaban con la Mesa de Enlace porque eran los que manejaban todo. Hoy me parece que la CIARA es la que maneja todo, los dólares que tanto precisa el gobierno. Se han puesto primero en una postura de no querer negociar. Desde agosto que nosotros denunciamos la revisión paritaria y nunca quisieron negociar”, manifestó Cristian en declaraciones a la agencia de noticias ANRed
#Solidaridad con la Huelga Nacional en la industria aceitera y de exportación de granos!#SalarioDigno #SalarioMinimoVitalMovil@CamaraAceites @FTCIODyARA @urgaracom pic.twitter.com/2LJLYlP1YK
— fol.comunicacion (@FOLprensa) December 28, 2020
Ayer se realizó en las redes sociales una difusión en solidaridad con los trabajadores que marcó una vez más que la unión de las y los trabajadores posibilita el cambio que tanto ansiamos para mejorar las condiciones de vida de nuestra clase.