“Proyecto Hábitat” consiste en el saneamiento del Arroyo San Francisco para mejorar la calidad de vida de los y las vecinas de Claypole. Surgió en 2018, cuando Martín Graziano, investigador del CONICET y biólogo de la UBA, comenzó a testear los niveles de contaminación en el agua ya que en los barrios Mariano Moreno y San Lucas se reportaron varios casos de infecciones cutáneas y respiratorias, sobre todo en niños. El objetivo, era tener un sustento técnico y a partir de allí comenzar a trabajar en conjunto.

Desde el FOL también se observó que una de las problemáticas más grandes era que el arroyo no era lo suficientemente ancho para contener los caudales de lluvia y eso causaba que se desborde e inunde todo. El agua contenía deshechos cloacales, ya que en los barrios no cuentan con agua potable ni conexión a redes cloacales, y además restos sólidos como por ejemplo jabón y shampoo. Es por esto, que con cuadrillas de trabajo se llevó a cabo un trabajo de cuidado y además un ensanchamiento de 25 metros del arroyo, lo cual finalmente solucionó el problema de las inundaciones.

El proyecto ahora se encuentra avanzado, y en una etapa de construcción de un humedal que ayude a la descontaminación del agua. El humedal consiste en plantas acuáticas que tienen propiedades de absorción de nutrientes y desintoxicación del agua, y que ayudan a mejorar el hábitat del barrio. Lucila, militante del FOL, participa activamente del plan y afirmó que “hay una buena recepción de los vecinos que ya comenzaron a notar los cambios”. Otro de los puntos consiste en la instalación de una estación meteorológica para controlar el caudal de agua que tiene cada tormenta y evaluar cuál es la resistencia del arroyo.

Además de la Facultad de Ciencias Exactas, articulan con el proyecto en difusión y planificación la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo también de la UBA y una cátedra de la carrera de Trabajo Social en la Universidad Nacional de La Matanza. “Nosotros proponemos el proyecto para que sea interdisciplinario y que todas las disciplinas tienen que ver con la practica barrial para el bien común de los vecinos”, aseguró Lucila.

El 16 de noviembre se llevará a cabo un evento de promoción del proyecto, ya que frente al Club Hermanas Mirabal existe un descampado que podría servir para la plantación de árboles y vegetación que también oxigenarían el aire y apañarían el calor en verano: “Los dueños del terreno quieren hacer un plan de viviendas y la construcción afectaría a nuestro proyecto ya que causaría más contaminación”, continuó Lucila. Es por eso que el evento contará con la colaboración de la Cooperativa de Producción Agroecológica para las actividades de siembra y talleres explicativos con la finalidad de concientizar en el barrio sobre la importancia de los espacios verdes y el cuidado de la ecología.