La muerte de Sandra Calamano (vicedirectora) y Rubén Rodríguez (trabajador auxiliar) no pasaron desapercibidas para la comunidad de Moreno. Las movilizaciones y concentraciones se multiplicaron en reclamo por Justicia y contra el ajuste que sufre el sistema educativo en el territorio bonaerense.

En ese marco y a dos meses de lo ocurrido, las organizaciones sociales, junto a la comunidad de Moreno, se hicieron presentes en la manifestación a dos meses de los asesinatos laborales sucedidos en la Escuela 49 de Moreno.

Desde el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) dijeron presente en la movilización de hoy que partió de la plaza Fuentealba hacia el Municipio, la Fiscalía y el Consejo Escolar.  “A dos meses del asesinato laboral de Sandra y Rubén, estamos movilizándonos docentes, movimientos sociales y familias, acompañando el reclamo de Justicia y de Escuelas dignas ya!”, afirmó Cristian integrante del FOL.

En ese sentido, Carolina, también del FOL, agregó que de fondo lo que hay “es el ajuste impulsado por el gobierno nacional y la gobernadora Vidal que tiene sus consecuencias directas en la educación y la salud, y en la precarización de la vida que sufrimos los sectores populares día a día”.

Cabe mencionar que previo a la explosión sucedida en agosto, gremios educativos y estatales venían denunciando la precariedad en la que se encontraban los establecimientos públicos, reclamo que fue desconocido por el gobierno provincial que mantenía una intervención sobre el Consejo Escolar de dicho distrito.

“Estamos marchando por Justicia, por Sandra y por Rubén. Queremos que las escuelas de Moreno y de toda la provincia de Buenos Aires sean segura para los trabajadores de la Educación y para los alumnos. Agradecemos que estén al lado nuestro y por apoyar nuestra lucha”, señaló Héctor, director de la Escuela 49.

Luego de los asesinatos laborales de Sandra y Rubén, la comunidad de Moreno empezó a autoorganizarse de cara a dar la pelea por el mejoramiento de las escuelas, que en su mayoría no retomaron regularmente las clases. Ollas populares, movilizaciones y asambleas fueron una característica distintiva de las iniciativas llevadas a cabo por los trabajadores en la región. 

Ahora bien, la organización desandada generó la respuesta de sectores reaccionarios que llegaron a secuestrar y torturar a la docente Corina De Bonis, a quien amenazaron de muerte para que desista de las acciones que venían llevando a cabo, como por ejemplo la realización de ollas populares para los alumnos que no tenían clases. A su vez, la semana pasada un establecimiento educativo fue incendiado lo que suma a las acciones intimidatorias contra los sectores organizados que lucha por garantizar la defensa de la Educación Pública.