Durante la jornada de hoy y mañana, distintas organizaciones sociales llevan adelante una campaña para visibilizar el hambre extremo que sufre gran parte de la población tucumana y visibilizar la falta de respuestas por parte del gobierno provincial de Juan Manzur. La medida finalizará mañana con una movilización y permanencia en Plaza Independencia.

Los convocantes son el Frente de Organizaciones en Lucha, el Frente Popular Darío Santillán y el Frente Popular Darío Santillán Corriente Nacional, y la Corriente Clasista Combativa. Los mismos se distribuyeron en varios puntos de la ciudad capital y a su vez en las principales plazas de pueblos del interior como Alberdi, Concepción y Aguilares.

“Se presentaron distintos petitorios al gobierno de Manzur para que atienda distintas problemáticas de las organizaciones sociales. El principal pedido son 3 mil puestos de trabajo y asistencia de mercadería y equipamiento para merenderos y comedores. Esos pedidos no han sido respondidos. Hace un tiempo se abrió una negociación por mercadería, pero lo que ofrecieron estaba muy por debajo de las raciones que pedíamos” dijo Santiago, militante del FOL.

La situación de pobreza y hambre que vive la provincia es desesperante, como sucede también en gran parte del país. Con un 32,2% de pobre y 6% de indigentes la provincia norteña se ubica dentro de una de las más golpeadas por la crisis y las políticas económicas del macrismo y del gobierno provincial. A su vez, 12 mil niñas y niños asisten a los comedores, que no dan abasto para satisfacer las necesidades alimenticias.

“El gobierno acá admite la pobreza pero le echa la culpa a las políticas del gobierno nacional. Pero la realidad es que el gobierno no atiende estas problemáticas y además está derramando millones de pesos en la campaña política porque las elecciones que son en junio. Y ese es un contraste que da bastante bronca, porque uno sabe que niegan puestos de trabajo y asistencia a comedores, y por otro lado gastan millones en cartelería, redes sociales y aparato” agregó Santiago.

La medida causó buena repercusión en la población, según contaron sus organizadores/as “le gente muestra su indignación, nos piden un teléfono de contacto, reciben los panfletos que les damos”. Es que así como el descontento crece en Tucumán también lo hace en el resto del país, donde la mayoría de la gente no llega a fin de mes, no consigue trabajo y ya ni siquiera changas.