El 28 de junio de 1969 en Nueva York una parte del colectivo LGBTTIQA+ se revelaba contra la brutalidad policial cansadxs de los constantes hostigamientos y violencias homolesbobitransodiantes recibidas.

Luego de 53 años seguimos luchando por nuestros derechos, porque tampoco hay orgullo sin acceso a la salud, al trabajo, a la educación y a la vivienda. Seguimos exigiendo ¡basta de crímenes de odio! y ¡basta de violencia hetero cis patriarcal!

Desde las revueltas de Stonewall hasta la actualidad, fueron estos mismos actos de rebeldía, orgullo y lucha popular con los que hemos conseguido el reconocimiento de nuestros derechos, pero aún queda camino por recorrer. Nos encontramos a 12 años de la sanción de la Ley de Matrimonio Igualitario y de la Ley de Identidad de Género en Argentina y seguimos siendo víctimas de ataques de odio, y de violencia biologicista y heteronormada en los centros educativos y de salud. Sumado a la desocupación y a la exclusión de los trabajos dignos.

Pero la igualdad ante el Estado no es lo mismo que la igualdad ante la vida ¿Cuánto impacto tienen las conquistas legales en la vida cotidiana del colectivo? Estas leyes no son suficientes, es necesario una aplicación real de la Ley de Cupo Laboral Trava-Trans nacional y una Ley Integral Trans que garantice todos nuestros derechos.

Hoy también es el día de la Marcha Plurinacional contra los Travesticidios y Tansfemicidios. En lo que va del año hasta el mes de abril, se registraron de manera oficial 4 transfemicidios/travesticidios, lo cual sabemos que esta cifra se encuentra subrepresentada debido a que los medios hegemónicos no visibilizan la totalidad de estos crímenes de odio. A su vez, se les suman a las muertes por travesticidio social, consecuencia de la desidia del Estado que se traduce en una expectativa de vida de 35 años para el colectivo. ¡Esto es genocidio, el Estado es responsable!

       Cuando hablamos de violencia heterocispatriarcal hacemos referencia a un sistema opresor que se encuentra encarnado en todas las instituciones sociales, las fuerzas represivas, la institución familiar, la iglesia, e incluso el mismo Estado que legisla las leyes que amplían nuestros derechos. Hablamos de un sistema que también es capitalista y colonial, que nos explota económicamente y se apropia de nuestros territorios. 

Nuestras necesidades y exigencias son las mismas que las de las clases populares y trabajadoras, porque somos trabajadorxs y porque el acceso a la salud, al trabajo, a la vivienda y a la educación tienen que ser para todxs. Las leyes deben efectivizarse con políticas públicas reales que garanticen nuestra dignidad y el derecho a vivir una vida plena. No alcanza con generar entidades desfinanciadas alejadas de la realidad de los barrios. Exigimos políticas acordes a las necesidades que se incrementan en este contexto de crisis económica, desocupación y flexibilización laboral que nos golpea más fuerte por las condiciones en las que nos mantiene este sistema.
             Nos encontramos a casi 6 años del caso de Higui que ha despertado un enorme apoyo popular y ha logrado su absolución. En octubre de 2016 fue a visitar a su hermana a Lomas de Mariló, en Bella Vista. Ella se había mudado del barrio porque un grupo de vecinos constantemente la amenazaban por ser lesbiana: le tiraban piedras cuando la veían con su pareja, incluso llegaron a prenderle fuego  la casa. Ese día, cuando se iba, los mismos vecinos la atacaron al grito de "Lesbiana forra, te vamos a hacer sentir mujer". La tiraron al piso, la patearon, le rompieron la ropa y se tiraron sobre ella hasta dejarla inconsciente. En algún momento de ese forcejeo Higui hirió de muerte a un agresor. Recobró la conciencia en una comisaría acusada de homicidio. El relato de Higui, una mujer pobre y lesbiana, con constantes hostigamiento cotidianos es común a la de muchxs compañerxs.

 Ya van a ser casi 3 años desde que el beso de Rocío y Mariana desencadenó un hecho de represión Estatal en Constitución.

Ya van casi 7 años del Travesticidio de Diana Sacayán y 4 años desde el fallo histórico que condenó a su asesino por Travesticida.

Ya van 5 años desde el travesticidio social y de Estado de Maite Amaya.

            Ya va mas de 1 año que Tehuel de la Torre sigue sin aparecer, habiendo sido expuesto a concurrir a una entrevista laboral de manera totalmente informal en la que desde ese momento no hay noticias de su paradero, mientras que la justicia se lava las manos con su búsqueda.

            Ya van mas de 16 años de la sanción de la Ley de Educación Sexual Integral y el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta prohíbe la implementación del lenguaje inclusivo en las escuelas.

Actualmente las mutilaciones genitales hacia lxs intersex continúa siendo una de las violencias más crudas que ejerce el sistema médico sobre estos cuerpos.

          ¡Por todo esto el 28 de junio, en el día del orgullo LGBTTIQA+ decimos más que nunca que la lucha es feminista piquetera y disidente! El orgullo y la rebeldía nos encuentran en la trinchera de la lucha popular, antipatriarcal, ¡anticapitalista y anticolonial!

¡Por la memoria de Lohana Berkins, por la de Marielle franco, de Pepa Gaitán, Maite Amaya y todxs lxs compañerxs víctimas de crímenes de odio, y de la represión y desidia estatal.

¡Presentes! ¡Ahora y siempre!

¡Al calabozo no volvemos nunca más! Arriba lxs que luchan!