¡Les niñes son el presente! ¿Qué queremos decir con esto? Que las niñeces existen, crean, piensan, sienten y viven en el AHORA, no esperan al futuro, a las proyecciones del mañana. Por eso, festejamos su existencia llena de colores, juegos y aprendizajes juntes. En un mundo que nos vive enseñando  desde la competencia, el desinterés y las relaciones de poder, nosotres elegimos construir otra cosa, otras maneras de organizarnos entre compañeres, en ronda, con la  música bien fuerte y los cuerpos listos para moverse desde el deseo y el juego. 

A lo largo del mes de agosto, se han desarrollado decenas de festejos por el día de las niñeces en los territorios donde nos organizamos y luchamos todos los días por niñeces libres, con dignidad  y derechos garantizados para todes. 

Los rituales de los festejos no faltaron: banderines decorando cada rincón, globos de muchos colores, juegos en la vereda, la calle y el comedor, exquisiteces para compartir entre compas y algunos parlantes retumbando en todo el barrio, son los condimentos de cada día de las niñeces. 

¡Festejar es  un derecho! Tal como lo son el  acceso a la educación, la vivienda digna, la salud integral, alimentación saludable, entre otros, el derecho al juego y esparcimiento de les niñes, también es un derecho. Si decimos que en Argentina, actualmente existe un  63% de niños,  niñas y adolescentes bajo la  línea de pobreza,  en un contexto pandémico donde ni siquiera están garantizados los derechos básicos y las necesidades elementales,  muchísimo menos está garantizado el  derecho al juego, al festejo, al encuentro con otres. El juego no es menos importante, ni menos necesario que otros derechos básicos, pero sí es verdad que es menos urgente. Por eso, desde nuestra organización apostamos cada año, cada día, a reivindicar el derecho al festejo, sembrando rituales que crecen y crecen. 

La escasez de políticas públicas para el sector de las niñeces es insostenible, la falta de recursos para nuestros espacios y les niñes que transitan en ellos, es visible ante los ojos de cualquiera, menos del Estado. La importancia de que existan nuestros espacios que respondan a  la necesidad: comedores, talleres para jóvenes y adolescentes, espacios de niñeces, jardines populares, y muchísimas maneras de organizarnos en nuestros territorios. 

Consultadas las educadoras e integrantes de los espacios de niñez FOL, Delma, Agustina y Pato respondieron acerca de los desafíos que se presentaron en estas jornadas, en este momento de la pandemia.

Delma, del jardín “Sembrando Huellas”, comentó que el día de las niñeces es un día especial, para hacerles saber que tienen derechos, por el solo hecho de existir y de gozar de una vida digna. Como primera línea el tema de los contagios, pero nada nos detuvo, por amor a les nenes, por amor al trabajo, por amor al jardín, y a todas las necesidades que lleva la vida cotidiana

Agustina, del Jardín "Hormiguitas", comentó que “uno de los desafíos de todos los espacios de niñez, es conseguir recursos, porque este día es muy importante. Siempre todos los espacios están queriendo como sacar lo mejor, y dar a les niñes lo que deberían tener y se merecen. Ir a varios lugares, conseguir un payaso, un castillo inflable, juguetes, donaciones, tocando la puerta al Estado para que de juguetes a niñes que son de los sectores más vulnerables de la sociedad y no tienen acceso ni su economía familiar da para que tengan un regalo en este día, que es simbólico e importante. Entonces el desafío es ir a “tocar manos” a todos lados como un petitorio de golosinas y juguetes y que el Estado te ignore, no te de pelota.

Nosotras empezamos el jardín desde junio, pero lo hermoso que fue esto del festejo fue poder reencontrarnos con todos los niños que estaban en el jardín, incluso les que ya estaban antes de la pandemia. Este año fue bastante positivo, y alivió bastante este dolor en el corazoncito que había dejado la pandemia de no poder tocarse, no poder jugar. Entonces volver, poder preparar los espacios de juegos, que se lleven regalos, bolsitas son muy importantes para nosotros, y también para el barrio que exista hace muchos años el trabajo en niñez.”

Por ultimo Pato de Hormiguitas En Lucha expresó que “este festejo representa la felicidad de les niñes y mostrarles la importancia en la vida que significan. El desafío más grande fue mantener cierta distancia con elles. Y personalmente para mí el festejo significo levantarme un día muy especial para que sea dedicado exclusivamente para elles...nada se compara con ver esas caritas felices”

La emoción que vierten las palabras de las compañeras, la energía que se transmite en cada centro comunitario, es el motor para el cambio que queremos

Luchamos y creamos  todos los días junto con las niñeces, para cambiar todo lo que deba ser cambiado, en la calle, el  comedor,  la asamblea y los espacios de niñeces. ¡Hasta que todo sea como lo soñamos, como lo jugamos, como lo inventamos!