Este próximo domingo 11, la villa 21-24 de Barracas va por un segundo intento de recuperar la Junta Vecinal para las y los vecinos del barrio, para que deje de ser caja y aparato del macrismo, sus punteros y cooperativas.

Es la villa más grande de la ciudad (alrededor de 85 mil habitantes), ubicada en uno de los barrios más grandes e importantes por su ubicación geográfica. Por ley, el Estado reconoce a su Junta Vecinal, como el órgano representativo de las y los vecinos, que debería, desde ese rol, gestionar proyectos de urbanización real, coordinar las obras, llamar a asambleas, asistir en situaciones de emergencia, como son las demasiado frecuentes inundaciones y cortes de luz.

Pero el vecindario denuncia que funciona como una caja negra para los punteros y sus cooperativas,  y que hay diversos casos de corrupción y complicidad con el gobierno de turno. Por lo que la democracia y la representatividad de ese espacio se encuentran fuertemente cuestionadas.

Hace años no se celebran elecciones de renovación de Junta (deberían hacerse cada dos), debido a los manejos arbitrarios y burocráticos de la Junta actual. Por medio de la presión popular organizada, que logró la intervención de la Justicia en el proceso electoral, el último domingo 28 de octubre era la fecha señalada para la gran oportunidad de que las y los vecinos tomen las riendas de su propio barrio. Pero el macrismo lo impidió: Las irregularidades en el padrón y en el operativo de las elecciones fueron escandalosas, logrando la suspensión de las elecciones.

Gracias a la presión ejercida por el mismo barrio organizado, este próximo domingo 11/11 se celebrarán nuevamente, con una supervisión mucho más rigurosa por parte de las listas participantes y de la Justicia, a fin de garantizar la transparencia que todo proceso democrático debe tener. 

El Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), junto con otras organizaciones populares como el Movimiento Evita, Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), el Frente Darío Santillán, La Poderosa, La Juana Azurduy y colectivos culturales y barriales, integran la Lista Azul, Roja y Negra (Lista 28), bajo el lema “Tierra, techo y trabajo”.

Una lista de unidad que incluye un amplio arco de organizaciones dispuestas a luchar por una participación genuina en la Junta; Para que desde allí se llame a asambleas, se trabaje por una urbanización real, se gestione obras, y que hayan soluciones concretas para las problemáticas estructurales del barrio.

Uno de los centros comunitarios del FOL viene desarrollando desde hace meses una ardua campaña que incluyó un festival, volanteos, afichadas, asambleas y charlas. Isabel Cruz es integrante de esta organización y es una de las que forma parte de la lista Azul, Roja y Negra, y fue elegida por sus pares para llevar adelante las propuestas y hacer la primera experiencia de participación en elecciones del barrio.

“Basta de negociar con nuestros derechos y recursos. Queremos una Junta Vecinal del barrio, para el barrio. ¡Este domingo, todas y todos a apoyar a la lista de la unidad popular!” arengaron integrantes del FOL que este fin de semana se mantendrán a la expectativa de los resultados de la votación.