El Poder Ejecutivo decidió implementar un aumento en las partidas del Ministerio de Seguridad por decreto, según develó el Boletín Oficial. A través de esta resolución se aumentará el presupuesto para la Policía Federal, Prefectura y Gendarmería con fondos provenientes de la ANSES, mientras que en el proyecto para el 2019 hay fuertes caídas en las partidas de Educación, Salud y Desarrollo Social.

Desde el gobierno se fundamentó que la razón de este incremento es aumentar sueldos y recomponer los haberes de jubilados y pensionados de las fuerzas. El monto total que se les proporcionará es la suma de 18 mil millones de pesos. Sin embargo, no es casual que se destine por decreto recursos ampliamente superiores, al Ministerio encargado de reprimir la protesta social, que va en aumento mes a mes por la fuerte crisis económica y social.

Durante sus dos primeros años de gobierno, Mauricio Macri aumentó en un 476% el presupuesto destinado al Ministerio de Patricia Bullrich. Sin embargo, esta también es la cartera con mayor subejecución durante el año pasado, en donde no se usaron 154 mil millones de pesos que habían sido destinados.

El presupuesto 2019 trae aparejado además la caída real para educación, salud y desarrollo social y por otro lado, se destinarían alrededor de 600 mil millones de pesos al pago de los intereses de la deuda pública contraída con el FMI. Mientras que el gobierno pronostica una inflación del 23% y un dólar a $40, las consultoras privadas estiman que la caída del peso argentino será del 33% y que la moneda cambiaria se ubicará en $50.

Es por esto que este 23 y 24 de octubre, día en que se votará en la Cámara de Diputados el proyecto de ley, sindicatos, movimientos sociales, organizaciones políticas, secundarias, universitarias y profesionales de la salud movilizarán frente al Congreso para exigir la no implementación del mismo, y aumentos significativos para los sectores más vulnerados.

Mientras tanto la Confederación General de los Trabajadores (CGT) y sectores afines llamarán a un Paro General de 36 horas con movilización recién en el mes de noviembre, es decir, varias semanas después de que se vote el ajuste en el recinto, favoreciendo así al gobierno que mantiene las expectativas altas sobre la aprobación del proyecto que le posibilitara concretar el acuerdo con el FMI.