Desde el Acampe Daniel Solano convocaron a la comunidad entera a jornada fue transmitida en vivo por el canal de YouTube que reproducimos a continuación.

“Creemos que, en este contexto, es necesario continuar tejiendo vínculos de lucha y resistencia que nos permitan seguir fortaleciéndonos y sosteniéndonos”, mencionan lxs compañerxs del Acampe al extendernos su invitación y también su brazo de solidaridad. Y porque como organización creemos firmemente que las redes de lucha y resistencia son las que nos sostienen ante tanta violencia, precarización y desigualdad que reproduce este sistema capitalista y patriarcal, es que decidimos mantener vivos aquellos lazos que vamos construyendo en las calles, en las ollas, en la tarea diaria. Y mantener viva la llama de los vínculos de resistencia es trabajar cotidianamente sobre nuestras memorias personales y colectivas.  Por este motivo, en nuestras asambleas estuvimos charlando y recordando sobre los 10 años de la desaparición forzada de Daniel Solano, 10 años también de la lucha de la lucha de Gualberto, familiares, vecinxs y compañerxs. “Yo creo que él tiene que ser recordado como una persona que luchaba por los derechos de los peones rurales que vienen a la zona a buscar un futuro mejor”, expresan lxs compañerxs en una tarde nublada y ventosa de asamblea.

Y como parte de la clase trabajadora desocupadx que luchamos por trabajo digno y con todos los derechos, conocemos las condiciones de explotación a las que son sometidxs lxs trabajadores, y más aun lxs trabajadores migrantes. Condiciones que Daniel tuvo el coraje de denunciar, y que hoy, en contexto de crisis económica y política, vemos cómo se profundizan con el crecimiento exponencial de la pobreza, el desempleo y la desocupación. Lo cual, como sabemos  flexibiliza y precariza aún más nuestras condiciones materiales de vida y de trabajo. Por eso es importante mantener encendido el legado de lucha que nos enseñó Daniel, alimentando la memoria para entender el presente: “es importante tener presente la memoria para que no pase nunca más. Gualberto solano buscó a su hijo hasta el último momento de su vida. Daniel, un muchacho que por tener la valentía de decir lo que pensaba fue desaparecido. Un muchacho trabajador que dejó su familia y hogar con la esperanza de un futuro mejor”.   

Por eso, para nosotrxs mantener viva la memoria de Daniel y Gualberto es una forma de no olvidar la dignidad de todas las personas que luchan por sus derechos, hoy los culpables caminan entre nosotrxs y su impunidad les hace sombra,  “hay que tener presente que ante su desaparición la justicia sigue respondiendo con impunidad, hasta el día de hoy los culpables están entre nosotrxs, continuaron sus vidas como que, si nada pasó, hay que tener memoria para que paguen sus condenas, memoria para reclamar justicia. Que no quede en el olvido, en la indiferencia”, expresa una compañera.

Sabemos que nuestra lucha no está separada de todas las injusticias que vive nuestro pueblo porque los métodos de explotación y persecución que le costaron la vida a Daniel se mantienen intactos. “Era un trabajador de la empresa Expofrut, empresa de acá, de Lamarque, un trabajador como podría ser tu hermanx, tu primx, tu hijx, que realizó reclamos por sus condiciones de trabajo y por su salario mal pago. Daniel ayudaba a sus compañeros a interpretar los recibos de sueldo, por ejemplo. Y su padre realizó una lucha constante para poder encontrar el cuerpo de su hijo y poder darle sepultura cómo se merece y cómo se debe. Pero el dolor y la tristeza de luchar para poder encontrar el cuerpo de su hijo lo fue matando lentamente”, son sentí-pensares que comparten compañerxs del FOL.   

La desaparición y muerte de tantos pibes y pibas de nuestro país es una muestra de cómo el estado burgués intenta disciplinarnos, hoy lo vemos con la odiosa e ilegal deuda externa con el FMI que tanto el macrismo como el peronismo nos quieren hacer pagar a costa del hambre y el saqueo de nuestro pueblo que nos condena por años a la miseria. La pandemia demostró una vez más que el capitalismo solo puede ofrecer muerte. El riesgo en el que se encuentra la naturaleza y todas sus especies y lo que se conoce como crisis climática es una consecuencia de este sistema.

Hoy como ayer no dejamos de nombrar a todos los cómplices civiles, jueves, fiscales, empresarios, policías y toda la dirigencia política que se enriquece con el orden existente. Nos preguntamos, ¿cómo podemos pensar una vida libre y digna si dentro de ella hay siete policías asesinos sueltos? ¿Se termina la lucha con la prisión de los responsables? La lucha contra las causas que provocan la pobreza, la discriminación y la injusticia, es la lucha del pueblo trabajador por conquistar una vida digna y en libertad, es la lucha de las mayorías populares contra un orden social y político antihumano. Creemos, hoy más que nunca, que necesitamos unir fuerzas y voluntades, que la bronca y la rebeldía nos lleve a la unión y con ellas a la pelea por un mundo justo, habitable y humano. El estado es responsable, y debe dar respuesta, por eso nos sumamos al grito de justicia, ¡por Daniel y Gualberto!

Hoy como ayer, el mañana nos espera. Hoy como ayer decimos:

¡No al pago del FMI!

¡Basta de persecución al pueblo Mapuche!!

¡Justicia por Daniel y Gualberto Solano!!